Restaura las funciones corporales
La solución a tus dolencias
¿QUÉ ES LA OSTEOPATÍA?
La osteopatía es una disciplina que en los últimos años está empezando a difundirse en toda España debido principalmente a los buenos resultados que aporta en numerosos problemas de salud. Es una forma de medicina manual muy poco agresiva y ampliamente efectiva. Cuando es practicada por terapeutas con la formación adecuada es totalmente segura y no existen riesgos.
La osteopatía es una modalidad terapéutica manual, que pone especial énfasis en la estructura del cuerpo, empleando principalmente el tratamiento de tejidos blandos y las correcciones articulares. En osteópata realiza un diagnóstico que consiste en valorar el grado de libertad de movimiento existente en determinadas articulaciones en relación al problema o dolencia que presente el paciente.
La movilidad es vida
Andrew Taylor Still, fundador de la Osteopatía
¿En qué consiste el tratamiento?
El tratamiento osteopático consiste en tratar las disfunciones, la hipermovilidad o hipomovilidad que se puedan encontrar en la columna vertebral, las articulaciones, el sistema nervioso, el sistema muscular, las vísceras y el cráneo.
Busca recuperar el equilibrio corporal perdido, reactivando sus mecanismos de autocuración con diversas técnicas terapéuticas: manipulaciones articulares, técnicas de energía muscular, de movilización, de streching, HVLT, funcionales, entre muchas otras. El tratamiento depende de una evaluación corporal completa, del tipo de lesión y del paciente. Ningún tratamiento es igual a otro y se debe seguir siempre un enfoque personal único.
Profesionales especializados en Osteopatía con más de 5 años de formación
Tipos de osteopatía
Dedicada al restablecimiento del aparato músculo-esquelético y de la postura, centrándose en la columna vertebral y traumatismos. Se basa en el principio de que la estructura y la función están relacionadas, si la estructura no está equilibrada, entonces la función se ve afectada y causa una «disfunción». Los síntomas surgen cuando su cuerpo debe lidiar con demasiada compensación que conduce a la «descompensación» de otra zona del cuerpo. Por ejemplo, un dolor en el pie que le llevará a caminar cojeando, si esto se combina con rigidez de la espalda o la pelvis puede provocar descompensación y dolor en la parte baja de la espalda o la cadera. Por lo tanto, el examen requiere un estudio exhaustivo de diversas posturas y pruebas de movimientos funcionales simples.
La osteopatía estructural o articular generalmente se enfoca en estirar los músculos y movilizar las articulaciones. Gracias a ella conseguimos que el esqueleto y el sistema muscular vuelvan a funcionar de manera correcta. Está indicado para dolencias como: luxaciones, dolores musculares y dolores articulares, tendinitis, esguinces, fracturas óseas, dolores de espalda, contracturas, dorsalgias, lumbagias, ciáticas, vértigos etc.
Se centra en los problemas craneales y su influencia en el sistema nervioso central. Estimula la curación mediante el uso de la presión de la mano suave para manipular el esqueleto y los tejidos conectivos, especialmente el cráneo y el sacro (el hueso grande y triangular en la base de la columna vertebral).
En la osteopatía craneal se da mucha importancia al sentido del tacto para percibir y sentir cambios sutiles de tensión y calidad del tejido en la anatomía viva de todo el cuerpo y para diagnosticar áreas de tensión o disfunción.
En el tratamiento, el osteópata es guiado por los tejidos y ayuda a reequilibrar o liberar las áreas de disfunción. El cuerpo tiene una capacidad asombrosa para curarse a sí mismo y mantener su propia fisiología en un estado de salud y utiliza el reequilibrio durante el tratamiento osteopático para restablecer la fisiología saludable.
La osteopatía craneal se utiliza para una amplia gama de problemas en niños y adultos, incluyendo cefaleas de distintos orígenes, neuralgias, parálisis facial, migrañas tensionales, vértigos, bruxismo, mareos, ciclos de sueño alterados, asma, estrés, ansiedad etc.
Enfocada hacia la curación de órganos y vísceras, mejorando la función de éstos mediante manipulación para conseguir un mejor riego sanguíneo.
El trabajo clínico del osteópata francés Jean Pierre Barral con las vísceras (órganos) condujo al desarrollo de una forma específica de medicina manual: la manipulación visceral. Todos nuestros órganos están suspendidos dentro del sistema musculoesquelético a través de conexiones fasciales específicas. Los osteópatas viscerales reconocen esta relación y utilizan sus habilidades de palpación para evaluar el movimiento de las vísceras y sus accesorios fasciales. Luego se aplican técnicas suaves para liberar cualquier tensión presente.
La manipulación visceral se basa en la colocación específica de fuerzas manuales suaves para estimular la movilidad, el tono y el movimiento normal de las vísceras (órganos internos) y sus tejidos conectivos.
El objetivo es ayudar al cuerpo a eliminar los efectos anormales. La osteopatía visceral da muy buenos resultados en patologías como el colon irritable, estreñimiento, gastritis, hernia de hiato, incontinencias, dolores menstruales, cistitis, trastornos menopaúsicos, patologías respiratorias crónicas, asma, bronquitis, etc.
Técnicas de osteopatía
La técnica de thrust es conocida como el «crujir o colocar las articulaciones«, en realidad lo que se consigue con esta técnica es desbloquear y permitir que el cuerpo recupere la movilidad correcta. En esta forma de manipulación, el osteópata aplica un impulso de alta / baja amplitud para restaurar el movimiento específico de la articulación. Así, la articulación recupera su rango de movimiento normal y restablece los reflejos neurales.
Es una técnica altamente efectiva que siempre, como todas las terapias físicas, ha de ser realizadas por osteópatas expertos.
Es una técnica de osteopatía que se basa en el trabajo terapéutico manual y sutil del cuerpo en las zonas en las que hay un exceso de tensión o dolor de origen musculoesquelético. Esta técnica implica aplicar una presión sostenida suave en las restricciones de tejido conjuntivo miofascial para eliminar el dolor y restaurar el movimiento.
La fascia es el tejido que recubre las vísceras, músculos, nervios, vasos sanguíneos y linfáticos. Todas las estructuras corporales están envueltas por la fascia y conectadas entre sí. Como su recorrido es continuo, cualquier tensión en una zona corporal concreta puede producir tensiones en otras zonas corporales, tensiones que pueden afectar a otros sistemas.
La técnica de energía muscular es una técnica de terapia manual que utiliza la energía de un músculo en forma de contracciones isométricas suaves para relajar los músculos a través de la inhibición autogénica o recíproca, y alarga el músculo.El punto en común de todas las técnicas de energía muscular es que debe usarse la fuerza del paciente durante el tratamiento. Así, mientras el paciente aplica fuerza en una dirección el osteópata la aplica en dirección contraria.
Se ha demostrado que las técnicas de energía muscular mejoran la amplitud del movimiento articular.
Esta técnica se usa para el tratamiento de las contracturas, de los puntos sensibles de la musculatura o para desactivar los conocidos «puntos gatillo».
Se basa en un abordaje indirecto, pasivo, no doloroso de la disfunción somática, carente de riesgo en los pacientes. Incluye la participación activa del paciente para encontrar el punto doloroso y la posición de máximo confort.
TARIFAS OSTEOPATÍA VISCERAL
Equilibrio para tu cuerpo
TU CENTRO DE BIENESTAR DE CONFIANZA